Una de las recetas más clásicas para preparar con las galletas Oreo es el Cheesecake o tarta de queso. Las famosas galletas norteamericanas comparten protagonismo con el queso crema. Para esta receta no es necesario el horno. Te aseguramos que a los niños, les encantará.
Ingredientes:
- 2 paquete de Galletas Oreo (de 150 gramos cada uno)
- 80 g de Mantequilla sin sal
- 300 g de Queso cremoso
- 300 ml de Nata para montar (con un mínimo de 35% M.G.)
- 80 g de Azúcar blanco blanco
Preparación:
Triturar uno de los paquetes de galletas Oreo para la base, utilizando un mortero o una picadora, pero sin que lleguen a quedar muy pulverizadas.
Derretir la mantequilla en el microondas. Cuando esté fundida, verter encima las galletas picadas y mezclar todo bien. Poner la pasta en el fondo del molde, presionando con una cuchara o con las propias manos, buscando conseguir una base compacta y lo más lisa posible. Reservar en la nevera para que se enfríe mientras preparamos el resto de la tarta. Poner el queso crema en un bol y batir para que quede aún más suave.
En otro bol, batir la nata. Cuando empiece a estar espesa, añadir el azúcar, sin dejar de batir, hasta que adquiera una consistencia densa. Agregar poco a poco, el queso al bol de la nata e integrar por completo.
Sacar el molde del frigorífico y verter el relleno. Alisar con una cuchara y meter de nuevo en la nevera durante 4 horas aproximadamente.
Transcurrido este tiempo sacarlo y, picar las galletas restantes y espolvorear por encima. Cortar el resto con las manos y colocarlas por la superficie a modo de decoración.